lunes, 5 de noviembre de 2012

Buscando Casa


Pues esta aventura sigue en pie. El viernes pasado trabajé medio día y a las dos de la tarde salí corriendo (bueno, manejando) a Guadalajara para encontrar a mi novia. Fuimos por la noche a ver un departamento que sonaba mucho mejor de lo que se veía, así que lo descartamos. Cenamos, platicamos y nos emocionamos por la búsqueda del día siguiente.

Al día siguiente emprendimos camino para ver una casa cuyo anuncio, con fotos y todo, nos había encantado. Ahí vamos las dos muy emocionadas en el coche, siguiendo las señas que nos dieron, y el camino empieza a dejar de verse pintoresco para verse un tanto decaído. Para no hacerlo largo, dimos como veinte vueltas por calles enredadas y llenas de baches, para al fin dar con una callecita privada donde estaba la mentada casa. Muy linda, nueva, amplia, con buenos acabados, ¡pero ubicada hasta la quinta! Sólo de pensar en pasar todo ese camino de ida y vuelta por la noche siento que me da algo. Como dice mi novia, muy linda muy linda pero eso de la ubicación fue un big turn off.

En fin, que seguimos vuelta y vuelta recorriendo en el coche varias zonas de la ciudad en busca de avisos de "se renta". Recolectamos infinidad de números de teléfono y nos dimos a la tarea de llamar. Que uno no contestan, que el otro da el contestador, que muchos son mucho más caros de lo que podemos pagar. Buscamos el periódico, vimos anuncios clasificados, paramos en todos los lugares que pudimos. Llamamos a todos. Por la tarde fuimos a ver una casa. Una zona hermosa, tranquila, muy arbolada, en una linda zona residencial. Llegamos. Entramos. Un fracaso. La casa no tiene piso, el refrigerador no cabe dentro de la cocina (¿quién demonios pensó que eso era una buena idea?) las recámaras son diminutas y los muebles no cabrían, y eso si es que consiguiéramos hacerlos subir por la escalera de caracol. Y bueno, otra decepción y descartada.

Sobra decir que cansadas, frustradas y preocupadas, porque aún no habíamos encontrado nada. Mi novia guardó los teléfonos que no contestaron, para llamar hoy. El domingo vimos el diario en casa de su abuela y llamamos para ver un departamento que sonaba muy bien: tres recámaras, dos baños completos, dos lugares de estacionamiento, cocina, sala-comedor, cuarto de lavado. La realidad no nos encantó, pero es lo mejor que hemos visto. Nos recibió una señora mayor muy cómica, que no paraba de hablar y contarnos los detalles del inquilino anterior. Que si tenía muchos gatos, que si hacía fiestas, que si venía de San Luis, que si lo enviaron de trabajo. Y en un momento de distracción nuestra (o sería que ya nos tenía mareadas el relato) nos dice muy fresca: "¿ustedes son pareja?" Mi novia y yo nos miramos con cara de sorpresa, sin poder creer tanta apertura de la vieja, cuando nos dice: "sí, son pareja de trabajo". Jaja bueno, era mucho pedir. Finalmente también el anuncio era muy bueno para ser verdad, porque el lugar tiene muchos detalles, no tiene estufa y el baño no es muy limpio. Así que a seguir buscando.

Mi novia se quedó, yo regresé anoche. Aún no tenemos nada y esto de buscar vivienda se ha vuelto una pesadilla. Hoy ha ido a ver otro departamento y ha vuelto otra vez decepcionada. Más tarde va por otro más, que espero no resulte otra pesadilla. 

Si alguien sabe dónde encontrar vivienda en Guadalajara para dos chicas muy responsables, en menos de cinco mil pesos, deposite sus informes aquí.

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